Soy Pilar madre de 2 hermosas mujercitas, somos de Antofagasta.

Las tareas para planificar el bebé se convirtieron en tareas para cerrar mi ciclo y llevar mi duelo, tareas que me hicieron llorar por el hecho que tenía que recordar muchas cosas, tareas difíciles de entender en un comienzo pero que al final todo tenía un por qué de hacerlas.

Al comienzo queríamos tener un bebé con mi pareja pero por mi edad (42) estaba con un poco de temor, pero algo pasó en un momento de mi vida en que este acompañamiento de Carolina tomó otro giro porque me separé y cuando le avisé dándole las gracias por la intención de acompañarme en mi 1er deseo ella inmediatamente continuó a mi lado convirtiéndose en una de las persona que me ayudó a salir de la enorme pena que tenía en ese momento.

Carolina siempre estuvo ahí, a pesar de la distancia, me sentía tan cercana, tan apoyada, tan contenida… ya sea por llamado o por WhatsApp hablándome con amor desde el corazón… me ayudó a abrir los ojos frente a ciertas situaciones y a estar más atenta para no permitir ciertos actos, y a ser yo misma sin temor, a encontrarme y a amarme.

Fueron 2 meses que entre ella y círculos femeninos pude levantarme y estar lista para otra etapa, tomando desiciones con responsabilidad y consciente. “El camino es de una” como bien me dijo nuevamente Carola, hoy ella sigue acompañándome en otra vivencia y agradezco al Universo por permitir que Maestras aparezcan en mi Vida.

Siempre llevo mi mantra aprendido de ella “Confío en el Universo, en que todo su orden es perfecto y me muestra los caminos para mi y para mis hijas”

Gracias Gracias Gracias…

– Por Pilar Cisternas